domingo, 17 de marzo de 2013

Fincas al occidente de la Sabana – La finca El Cerro

Colibrí picoespada (Ensifera ensifera) - D. Daniels, 2012
Hace cosa de un año, antes de que empezara a publicar mis artículos en este blog, ya había escrito algunos textos sobre la biodiversidad de las fincas al occidente de la Sabana de Bogotá, los cuales distribuía por correo electrónico a varias personas interesadas. Quiero ahora rescatar y ampliar uno de ellos, publicándolo como es debido, con fotografías y todo. Se trata del artículo sobre la finca El Cerro, en Subachoque, finca en la cual crecí y viví durante muchos años. Esta finca fue mi “escuela” de biología y ecología, mi laboratorio viviente de restauración ecológica: casi 25 años después de que mis papás la compraran, el área de bosque se ha duplicado. Donde antes se sembraba papa y había tierra desnuda y arada, ahora hay un bosque con el piso acolchonado, ideal como protector y regulador de los caudales de agua. Donde antes sólo había pasto expuesto, ahora hay un juego de luces y de sombras donde crecen las orquídeas, donde caminan los cusumbos, donde el bosque empieza a madurar. Transcribo entonces lo que escribí aquella vez.

 

Variedad de hábitats

Clavellino (Mutisia clematis)
La finca “El Cerro” está situada en el municipio de Subachoque, cerca de La Pradera. Tiene una extensión de 6 hectáreas y está situada en un terreno con pendientes fuertes, ocupando un rango altitudinal entre 2880 y 3070 metros sobre el nivel del mar. Su topografía increíblemente variada incluye un cañón rocoso con vegetación de subpáramo, una hondonada donde corre una pequeña quebrada protegida por bosque húmedo, laderas con suelo poco profundo cubiertas por bosque bajo de encenillos y una diversidad de sitios con vegetación en regeneración.

 

Estudios en la finca

Esta finca es el lugar donde he realizado los Inventarios de Biodiversidad más completos. Actualmente, hay registros en ella de 12 especies de mamíferos, 82 especies de aves, 4 especies de reptiles, 1 especie de anfibio, unas 40 especies de mariposas y 483 especies de plantas vasculares. En esta finca surgió el proyecto de hacer un catálogo de la flora vascular de todo el valle del río Subachoque, proyecto realizado en conjunto con el Herbario Nacional. Luego de 9 años de trabajo, el catálogo fue publicado en el año 2007 en la revista Caldasia, incluyendo un total de 1008 especies de plantas. En la finca también realicé grabaciones de cantos de más de 40 especies de aves para el Instituto Humboldt. Y el sitio ha sido visitado por observadores de aves, fotógrafos de naturaleza e investigadores.

 

El regreso de la flora nativa

Las extrañas flores de la orquídea Masdevallia arminii


Lo increíble de la finca El Cerro es la regeneración de su vegetación. Hace algo más de 20 años, cuando mis papás la compraron, la mitad de la finca estaba deforestada y dedicada al cultivo de papa. Actualmente casi toda ella está cubierta por vegetación boscosa. Casi toda esta recuperación del bosque sucedió de manera espontánea, no volviendo a cortar el pasto y permitiendo que creciera toda la “maleza” y arbolitos nativos que los pájaros y el viento iban sembrando.

Las orquídeas terrestres han regresado por centenares y las jóvenes bromelias van invadiendo las ramas de los arbolitos en crecimiento, los cuales, cada vez, se van haciendo más altos y espesos. El ambiente a la sombra del joven bosque es ahora perfecto para la reintroducción de los árboles de madera dura y lento crecimiento, es decir, los árboles del antiguo bosque maduro, casi todos ellos en peligro de extinción. Para esto tengo un pequeño vivero en la finca donde reproduzco al pino hayuelo o negro (Prumnopitys montana), chuguacá (Hieronyma rufa), aguacatillo (Persea mutisii), susca (Ocotea calophylla), calabacillo (Meliosma arenosa) y otras especies propias de las montañas de Subachoque.

Con el regreso de la vegetación, la fauna también ha regresado: la finca alberga cusumbos, zorros, chuchas, curíes, comadrejas, conejos, águilas y gavilanes, búhos, tangaras y 13 especies de colibríes. ¡Y el año pasado [o sea hace 2 años ya, pues esto fue escrito en el 2012] descubrí por vez primera la presencia de pavas de monte!

 

Unas notas sobre las especies endémicas y las amenazadas

Amarguero (Ageratina asclepiadea) - Endémico
Reservorios de biodiversidad como la finca El Cerro cada vez son más importantes en Colombia y, en particular, en la región andina, donde la destrucción y la degradación de los hábitats están acabando con el patrimonio natural del país. Resulta especialmente significativo conocer, en cada uno de los terrenos que son protegidos, qué especies de plantas y de animales presentes pertenecen a las categorías de especies endémicas (que sólo se encuentran en Colombia) y de especies amenazadas. En la finca El Cerro se ha identificado que cerca del 10% de las plantas nativas que crecen silvestres (sin contar las que han sido introducidas por mí) son endémicas del país.

Las 34 especies de flora endémica que se han identificado hasta el momento son el helecho Diplazium bogotense, bejucos lechosos (Cynanchum trianae y Matelea mutisiana), yuco (Schefflera bogotensis), amarguero (Ageratina asclepiadea), cabezona (Calea peruviana), frailejón (Espeletiopsis corymbosa), romero de monte (Pentacalia pulchella), camargo o upacón (Verbesina crassiramea), varias otras asteráceas de bosque y matorral (Asplundianthus arcuans, Baccharis bogotensis, Chromolaena bullata, Fleischmannia klattiana, Mikania laurifolia, Pentacalia americana, Sabazia trianae), uña de gato (Berberis rigidifolia), piñuela (Greigia stenolepis), cardo (Puya lineata), quiche (Vriesea sp. nov.), uvo de monte (Cavendishia nitida), Macrocarpaea glabra, salvia morada (Salvia amethystina), charne (Bucquetia glutinosa), tunos (Miconia biappendiculata, Miconia squamulosa), angelito blanco (Monochaetum coronatum), chuguacá (Hieronyma rufa), mortiño (Hesperomeles goudotiana), uche (Prunus buxifolia), botoncillo (Borreria bogotensis), Symplocos mucronata, té de Bogotá (Symplocos theiformis) y Citharexylum sulcatum.
Rana Dendropsophus labialis - endémica

La finca también alberga algunas especies de fauna endémica, como el chamicero (Synallaxis subpudica), la serpiente tierrera (Atractus crassicaudatus) y la rana Dendropsosphus labialis.

Entre las especies presentes en la finca y que han sido catalogadas como amenazadas destacan el pino hayuelo (Prumnopitys montana, VU), los cardones (Puya lineata, NT, Puya nitida, NT) y el cedro (Cedrela montana, VU).

No hay comentarios:

Publicar un comentario